Nadie debiera morir sin conocer Lisboa
“A fin de celebrar el inicio de aquella fructífera amistad, se habían emborrachado juntos en las tascas de fados del Barrio Alto, mientras el ex sargento paracaidista rumiaba nostalgias coloniales, contándole a Corso el modo en que estuvieron a punto de volarle los huevos en la batalla de Gorongosa. Terminaron cantando ‘Grándola vila morena’ a grito pelado en el mirador de Santa Lucía, con el barrio de Alfama iluminado por la luna, a sus pies, y el Tajo más allá, ancho y reluciente como una sábana de plata sobre la que se deslizaban, muy despacio, las siluetas oscuras de los barcos rumbo a la Torre de Belem y el Atlántico”.
Arturo Pérez Reverte – El Club Dumas.
El tren había salido desde Salamanca a la madrugada. Apenas se puso en movimiento nos quedamos dormidos, y abrimos los ojos cuando nos despertó el estrepitoso eco que el ruido del tren expandía en colaboración con la abovedada cúpula de Santa Apolonia, la estación de trenes de Lisboa.
Con el sopor intacto de un despertar brusco, salimos al exterior y nos encandiló un clamoroso sol, brillante y amarillo intenso, a pesar de que estábamos en pleno invierno, aunque el invierno en Lisboa en nada se parece al de otras regiones de Europa.
El recorrido desde la estación de trenes hasta el centro es un deleite. A la izquierda, el amplio, tranquilo y plateado Tajo, que por la cercanía con el
Atlántico, parece más un mar que un río. A la derecha, las colinas de Alfama, uno de los barrios más sugestivos de Europa.
En La Baixa, el barrio costero céntrico de Lisboa, junto al río, se halla la Plaza de Comercio. Las construcciones que la rodean ocupan tres lados de la plaza, ya que el cuarto permanece despejado, abriéndose al río.
Desde allí nace la peatonal de la ciudad, inmaculada, con piso de mármol, que nace luego de una arcada.
La peatonal y sus calles circundantes están abarrotadas de tiendas, de artistas y de músicos en las terrazas de los bares. Al otro extremo de la peatonal, unas diez cuadras, se llega a la Plaza del Rossio, bellísima, y punto de partida de casi todos los autobuses y tranvías de la ciudad, inclusive los que llevan a Belem, el mítico distrito al oeste de la ciudad.
Belem destaca por su torre, histórica, patrimonio de la humanidad, que en los siglos XVI y XVII servía como aduana para quienes llegaban a la ciudad; por el Monasterio de los Jerónimos, de estilo manuelino, del siglo XVI, y por supuesto, por los célebres “pastelitos de Belem”, sabrosísimos, que constituyen un ritual desde hace más de un siglo.
Hacia el este, del otro lado del centro, se encuentra Alfama, el barrio más entrañable y bohemio de Lisboa. Perderse en sus callejuelas y admirar la ciudad desde sus numerosos miradores es algo inolvidable.
El Barrio Alto, cerca del centro, es la mejor opción para terminar una jornada en Lisboa. Los ricos platos a base de pescado, el envolvente fado que impregna las adoquinadas callejuelas y la atmósfera cosmopolita de la ciudad, la hacen única, tan única como la historia de un pequeño país que conquistó buena parte del mundo a partir de sus míticos navegantes.
Aún hoy, cuando la Torre de Belem ya no guía a aquellos marinos hacia los océanos del mundo, Lisboa sigue oliendo a mar, a pescado, a barco, a aquellos claveles ya marchitos.
Fotos (de arriba a abajo)
1) El Barrio de Alfama desde uno de sus hermosos miradores
2) Mariana desde el interior de la Torre de Belem
3) La Peatonal de Lisboa
4) La Torre de Belem
5) Vista de Lisboa desde Alfama
6) La Plaza de Comercio, en el centro de Lisboa
7) El Río Tajo desde Belem
8) El Río Tajo desde el interior de la Torre de Belem
Arturo Pérez Reverte – El Club Dumas.
El tren había salido desde Salamanca a la madrugada. Apenas se puso en movimiento nos quedamos dormidos, y abrimos los ojos cuando nos despertó el estrepitoso eco que el ruido del tren expandía en colaboración con la abovedada cúpula de Santa Apolonia, la estación de trenes de Lisboa.
Con el sopor intacto de un despertar brusco, salimos al exterior y nos encandiló un clamoroso sol, brillante y amarillo intenso, a pesar de que estábamos en pleno invierno, aunque el invierno en Lisboa en nada se parece al de otras regiones de Europa.
El recorrido desde la estación de trenes hasta el centro es un deleite. A la izquierda, el amplio, tranquilo y plateado Tajo, que por la cercanía con el
Atlántico, parece más un mar que un río. A la derecha, las colinas de Alfama, uno de los barrios más sugestivos de Europa.
En La Baixa, el barrio costero céntrico de Lisboa, junto al río, se halla la Plaza de Comercio. Las construcciones que la rodean ocupan tres lados de la plaza, ya que el cuarto permanece despejado, abriéndose al río.
Desde allí nace la peatonal de la ciudad, inmaculada, con piso de mármol, que nace luego de una arcada.
La peatonal y sus calles circundantes están abarrotadas de tiendas, de artistas y de músicos en las terrazas de los bares. Al otro extremo de la peatonal, unas diez cuadras, se llega a la Plaza del Rossio, bellísima, y punto de partida de casi todos los autobuses y tranvías de la ciudad, inclusive los que llevan a Belem, el mítico distrito al oeste de la ciudad.
Belem destaca por su torre, histórica, patrimonio de la humanidad, que en los siglos XVI y XVII servía como aduana para quienes llegaban a la ciudad; por el Monasterio de los Jerónimos, de estilo manuelino, del siglo XVI, y por supuesto, por los célebres “pastelitos de Belem”, sabrosísimos, que constituyen un ritual desde hace más de un siglo.
Hacia el este, del otro lado del centro, se encuentra Alfama, el barrio más entrañable y bohemio de Lisboa. Perderse en sus callejuelas y admirar la ciudad desde sus numerosos miradores es algo inolvidable.
El Barrio Alto, cerca del centro, es la mejor opción para terminar una jornada en Lisboa. Los ricos platos a base de pescado, el envolvente fado que impregna las adoquinadas callejuelas y la atmósfera cosmopolita de la ciudad, la hacen única, tan única como la historia de un pequeño país que conquistó buena parte del mundo a partir de sus míticos navegantes.
Aún hoy, cuando la Torre de Belem ya no guía a aquellos marinos hacia los océanos del mundo, Lisboa sigue oliendo a mar, a pescado, a barco, a aquellos claveles ya marchitos.
Fotos (de arriba a abajo)
1) El Barrio de Alfama desde uno de sus hermosos miradores
2) Mariana desde el interior de la Torre de Belem
3) La Peatonal de Lisboa
4) La Torre de Belem
5) Vista de Lisboa desde Alfama
6) La Plaza de Comercio, en el centro de Lisboa
7) El Río Tajo desde Belem
8) El Río Tajo desde el interior de la Torre de Belem
48 Comments:
Que lindos lugares conoces tu...
no creo que alcance a conocer Lisboa... asi es que sere inmortal! jaaajajaja
saludos!!
Realmente es envidiable [sanamente] tu vida... cada lugar que visitas, de donde tienes tan bellas imagenes y recuerdos, y qué más, con esa forma de relatarnos, es como que más ganas dan de visitar esas partes maravillosas...
Se te agradece...
besos de chocolate...
suscribo el título!
y no para decir después que como no he estado no morir nunca... no, lo suscribo porque realmente quiero ir.
he estadao en portugal pero en el sur, en el algarve.
Que belleza de lugares... la vista se ve formidable, realmente el relato y la forma de verlo de aquellos que van de visita inyecta en los lectores las ganas de conocer... los pasajes de Lisboa empiezan a tomar forma en mi mente :D
Voy a leer abajo... creo que me perdi de harrrto :D
Aire
.
Habrá que ir entonces... en las ultimas vacaciones, tenía a Portugal en mi lista pero al final me incliné por otro viajecito pero después de este post, pasa a encabezar la lista :-D
Saludos!!!
lindo lugar...
un beso
Daniel, siendo vos alguién a quién parece desvelarle la pobreza ajena, admiro tu capacidad de patinar euros en fines lúdicos (¿apostás al efecto derrame no?).
Corazón a la izquierda, bolsillo a la derecha.
Hasta la victoria siempre.
...hermosas fotos Daniel, hermosas. Me arrepiento no haber pasado a Portugal cuando estuve por allá, de todas formas el presupuesto no creo me lo hubiése permitido.
Siempre quedará de materia pendiente =)
Fuerte abrazo.
Que preciosas fotos y que felices se les mira... ahora sé que aún no puedo morirme... pues no conozco Lisboa!
Mil besos y feliz finde!
Vaya querido Daniel, al visitar hoy tu blog te he acompañado en tu viaje, ja ja ja, y como no hacerlo ocn tan bellas imagenes y tan grata descripción, gracias por compartirlo.
Abrazos con mucho cariño.
Desde luego Lisboa está entre mis próximos destinos y después de este post aun más. Me encanto ese estracto de Reverte al principio. Qué gran libro. Como todos los suyos. Bueno me despido que voy a pasar unos días en Malta. Creo que podré contaros que tal desde allí. Besos.
Hola señor paseante, acabas de cumplir uno de los sueños de mi padre: conocer Lisboa.. vas a pasear tambien por otras ciudades de Europa? habrá más fotos?
un abrazo
MI NOVIA ME INSISTE CONTINUAMENTE QUE VAYAMOS A OTRO PAIS. ELLA CONOCE ESPAÑA, O POR LO MENOS PARTE DE ELLA. ME IMAGINO QUE EL CONOCER EUROPA DEBE SER INTERESANTE, AUNQUE AQUI EN COLOMBIA LA MAYORIA DE LAS PERSONAS QUIEREN VIAJAR A ESPAÑA. GENERALMENTE NUNCA NOMBRAN A PORTUGAL COMOUN DESTINO. PERO POR LO QUE VEO NOS ESTAMOS PERDIENDO DE MUCHO.
Sabes Daniel ???? tù y la Mariana hacen los lugares màs bellos !!!!!!!!!!
Tampoco pase por Portugal pero es una deuda pendiente ... Espero eso si no ser victima del acoso por el caso MADELEINE .( y que se resuelva pronto por el bien de la humanidad y de la Prensa )
estaba pensando lo mismo que hada... jajaja pero ella ya me ganó en decirlo...
De algún modo, Lisboa y el Tajo me recuerdan a Concepción y el Bío-Bío...aunque los miradores le dan un aire más a Valparaíso.
Y claro, recuerdas que cuando Portugal no era mucho comparando con los Reinos más poderosos de Europa, se dio maña para sacar ventaja en el descubrimiento de nuevas tierras...aplicaron la estrategia de factorías que habían hecho los fenicios en el Mediterráneo.
Antes de despedirme, permíteme el siguiente favor...
"Solicito amablemente tu apoyo y tu voto para Tamy y Luis Alejandro en la elección de Miss y Míster Blogger 2007 desarrollada por el Club de Lulú. Deja tu mensaje en esta columna en respaldo a la Opción 6, que somos nosotros; más informaciones en los links que acompañan este mensaje. Por la atención, muchas gracias".
Saludos cordiales...y a ver si hago una escala en Lisboa alguna vez.
me encantaron tus imágenes destilan felicidad
Mandá el pasajeeeeee!!!!!!!!!!!!!!
Gracias por tu comentario de apoyo mi buen amigo argentino, cuidate mucho y pues acá estoy de vuelta deleitandome de tus textos...
Viajar es vivir mi estimado, de eso no hay duda
Sin duda bellísimo, espero tener algún día la posibilidad económica de ir para allá
No sé si tendré algún día la oportunidad de conocer Lisboa, pero leyendo tu relato, siento que conocí un poquito de su belleza...
Un beso Daniel!
Ah tocayo que sana envidia me da el relato y las imágenes, hace ya muchos años que no he vuelto a viajar y se siente en la piel.
definitivamente si parece un lugar que hay q visitar!!!!
espero poder hacerlo algun dia!!!
=)
Hola amigo, Lisboa se ve hermosa, las fotos espectaculares, y la minuciosidad con que la describes en tu relato maravilloso.
Saludos
Dichoso que pudiste ver, oler, sentir semajantes lugares!!!!
Qué oportunidad única...no?
Los claveles marchitos y e pescado...
Muy lindo paseo, gracias Dany!!!
Me encanta esa mezcla del pasado y lo actual que tiene Europa.Un abrazo!
Oye, Daniel ¿en total cuántas ciudades y/o países conoces?
Cariños.
Me fascino eso de que la plaza tenga uno de sus lados para ver el río... que genial... o sea, es de ensueño.
Cuantos lugares hermosos has pisado...
Saludos
Buena Onda por compartir tan hermosas Imagenes, siempre hemos dicho que el turismo que no afecta el contexto es el mejor, Como decia un mi cuate...Tome la foto y dejelos como estan.
Salu2
directo a la lista de lugares por visitar!
tengo muchisimas ganas de ir a Lisboa, nunca he llegado pero llegare, y mas despues de la descripcion.
Y si,los periodistas independientes la pasan mejor en Portugal que en Cuba:
Normando Hernández fue condenado a 25 años de prisión, acusado de atentar contra "la independencia y la integridad territorial" de la isla. El fiscal le endilgó "una actividad cotrarrevolucionaria virulenta y febril" que calificó como "socialmente muy peligrosa" citando sus corresponsalías a sitios de Internet y a emisoras estadounidenses.
Daniel tan cierto como que el cielo es azul... Lisboa lo màs de lo màs los màximo a la N potencia y ojo no porque mi Niño Grande sea de allì sino que es una ciudad inolvidable, esa mezcla de lo moderno, lo urbano con lo antiguo, la Expo magistral, esa Torre de Belen impelable esa foto, Dios hasta La Casa Rosada es bella, Cascais y esa Costa maravillosa, esa arena clarita, esa panaderia donde se pueden probar aquellas ricas "natas" las mejores de Portugal para mi cerca de la Casa Rosa y de la Plaza de Comercio.
Bello post mil saludos siempre me mataste con este post, adoro Lisboa Daniel.
gracias por el viaje con la imaginacion y por las fotos tan bellas que pones, abrazos
Vida: leer tus relatos es volver a viajar y recordar momento a momento los mágicos lugares que recorrimos juntos.
Cuando volvemos de visita a ese Portugal que tanto nos gustó???
No ves que estoy con antojo de un pastelito de Belem???
Te amo!
Mariann.-
Hola!!!!!!!!
ZALAMANCA, allí nació mi abuelo, como me gustaría conocerla, llego aquí a los 16 años.
Que buenas fotos y cuanta cultura haba pasado por LISBOA, por esas calles.En la peatonal, ni un papelito en el suelo........
Que bella niña la de la foto. Felicidades a ambos.
Un besote y abrazo de oso.
Ja!! Que vida tan dura...
Vos si que la pasas mal eh!!
Me encanta venir a tu blog y pasear por el mundo... aunque no me voy a morir sin conocer Lisboa..
Como siempre que te leo, me voy con el alma llena!!!
Besos!!
hola daniel, mariana y vos son bastante trotamundos, al igual q yo :)...me gustaria conocer lisboa y todo portugal! siempre voy tan lejos, a pesar de que tenemos tantos lugares bonitos en europa..
saludos a los dos!!
Nadie deberia morir sin conocer mi puebloo!! jajaja
Lindo Lisboa, si algun dia tengo algo de dinero trataré de ir... será uno de mis destinos
No sabía de toda esa belleza de Mexico, buenisimo enterarme. Gracias!
En mayo pasado visite Lisboa,increible ciudad,,un encanto,,
Saludos
Wow!!!
En verdad eres un trotamundos, que delicia de viaje!!
beso volados
Ne
¿Ché, qué hacén ustedes para viajar tanto? denme el secreto por favor.
Una aclaración con todo respeto para Antonella: Lisboa es de Portugal, no de México.
Saludos,
Me sumo a la lista de quienes los envidian por viajar tanto
Gracias por linkearme, agradable sorpresa
Delia
Pepepepepéeeeeee!!!!!!!
te dejo este abrazo....y
El souvenir del cumple...qué glamour!!
Aguanten los Pumas!!!!!
River o Boca!!! Qué menú para mañana!!!! Besote!
Siempre hago el mismo comentario cuando pones un post como este: ¡qué envidia!.
Aja!!! hago una protesta pública. Primero México y ahora Lisboa.....y Guatemala cuándo???. Jajaja son mentiras, bueno no, es decir, aquí los esperamos también. Siento que a traés de tu relato ya viajé hasta allá. Si voy algún día, seguramente recordaré todo lo que has escrito.
Gracias por no olvidarte de uno y seguir visitando.
Abrazote
Unas fotos y unos textos magníficos que sirven para transmitir la magia de Portugal. Saludos.
Me dejaste suspirando. Me uno a la frase de un peridista colombiano: "Viajar es un sueño que no termina nunca".
Un sitio que hay que tener en cuenta. Las imágenes muy sugestivas.
Un saludo cálido para tí!
Publicar un comentario
<< Home